Y se llama Lima...

Me vio nacer y crecer, me vio caerme y levantarme, me vio llorar y sonreir, me vio mas feliz que nunca y mas asustada que nadie, tratando de entenderla, de conocerla, de cuidarla, tratando de sentirme mas de ella.

Cuántas veces no hemos soñado con irnos a otro lugar, de salir de sus paredes desgastadas y cubiertas por el humo, llenas de callejuelas sin salidas y maltratadas por muchos, queremos irnos para ver algo del mar o del campo, es normal, todo cansa de vez en cuando, pero no dejamos de amarla, yo no, la amo con sus virtudes y defectos, porque cada distrito tiene su propia historia que contar, pero al fin y al cabo todos somos Lima.

Capital, ciudad colonial, Lima la horrible, y otros muchos nombres le han puesto, yo la llamo Lima de mis amores, será la tierra y los recuerdos que me llenan de satisfacción y sentimientos encontrados en ella, pero es como un amor platónico, nunca dejas de amarla.

Lima con su Comas, su Rimac, Miraflores y Surco, La Alameda, Pachacámac, el Barranco infinito y su Victoria vieja, tiene historia y es indiscutible, cuenta anécdotas tremendamente increíbles y ha sido testigo de grandes penas. Alberga en sus calles a mas de ocho millones de personas, pero no sé si todas la quieren como yo, aun así soy como una hija pródiga, no hago mucho tampoco por verla mejorar, pero pienso que mejor que empezar conmigo misma, mejoro yo, mejora ella, no soy la persona mas educada sin embargo, entre mi infancia, el colegio y mi familia aprendí que hay que cuidar nuestra casa, para eso necesitamos de actitud, necesitamos dejar el egoísmo atrás y empezar a hacer algo productivo, que les parece empezando por no botar papelitos al suelo, que les parece respetando la propiedad ajena, cuidando las áreas verdes, respetando las reglas de tránsito, que les parece respetando la vida.

En estas fiestas patrias, debería talvez escribir sobre Perú, pero siendo realistas mi Perú es Lima, y eso que tenemos entre la costa, sierra y selva, grandes paisajes, pero mi primera realidad es Lima, es innegable y entendible mi amor por ella, ahora que me encuentro a 9 horas de ella, puedo sentir su ausencia. Ahora que me siento extraña y aun desubicada en una ciudad que siendo de Perú, no la siento mía.

Podré irme de ella unos meses, podré disfrutar increíblemente de otros lugares, pero será siempre mi primer amor, Lima es mi ciudad y estoy orgullosa de ella.