Se fue todo al diablo

Se fue todo al diablo cuando mencionaste tu libertad.

Se fue todo al diablo por que no supiste decirme adios en su momento.

Se fue todo al diablo por que mentiste.

Se fue todo al diablo por que siempre te llevé en alto como virgencita.

Se fue todo al diablo el día que la besaste a ella en vez de a mi.

Se fue todo al diablo por que no supiste pedir perdón en su momento.

Se fue todo al diablo por que siempre terminaba regresando a tus brazos.

Se fue todo al diablo por que no quisite crecer conmigo.

Se fue todo al diablo cuando dejamos de amarnos hace tanto tiempo.

Ahora ya tus explicaciones, tus recuerdos, nuestros lamentos no sirven de nada.

Ahora sólo queda las instenciones de días pasados, hermosos pero pasados.

Ahora después de haber luchado contra mi esperanza es que entiendo que no nos amamos mas.

Se fue al diablo todo contigo.

Cuesta olvidar

La conciencia de conocerse es arrebatadoramente desgantante. Saberse mujer y adulta. Reconocerse en el tiempo cuesta, como las verdades mas crudas cuando te recuerdan que sólo eres uno mas de entre todos. Chica relativa, alguien dijo que me catalogué así aunque no recuerdo cuándo.


Se supone debería saber qué es lo quiero a estas alturas de mi vida, o por lo menos tener una idea. La tengo, la idea. Ahora me falta ponerla en práctica. Romper mis esquemas cuadriculados y salir al mundo a defender mi posición, al menos de aquellos que me digan que no puedo. Y como todo lo creo relativo quien sabe si aún lo haga. ¿Será miedo?


Mas miedo creo tener de mí que de los demás, será por algo, mi subsconciente lo sabe. ¿Pero acaso no todos nos temenos miedo? es normal que como ser humanos nos enfrentemos a un constante temor, muchas veces a causa de traumas psicológicos de la niñez, adolescencia o simplemente adquiridos por una mala experiencia. Aun así dicen que no debemos generalizar las malas experiencias y mucho menos permitir que éstas determinen nuevas descisiones por nosotros.


Pero somos humanos y como seres imperfectos que somos necesitamos del error para aprender; del tiempo prolongado y pacienzudo para poder curar heridas, que sin duda dejarán cicatrices. He aquí asumir la realidad y dejar correr la sangre un tanto mas para que empieze a cicatrizar. Pero estaré con las manos atadas para dejar de tirar de la cicatriz una vez mas.


En la soledad me entiendo mas, pero aún así no termino de comprender ciertas actitudes mias para con ciertas personas. Seguro busco la familia que perdí en algún momento. Aun creo hallar en los rostros de algunos a esas buenas personas que se cruzaron por mi camino y que de alguna manera inspiraron en mí esperanza. Seguro aun busco al hermano que nunca llegué a conocer. Aun escabo en lo mas profundo de mi cabeza, buscando respuestas de las preguntas que nunca hice pero que existen.


Cómo preguntarme por mi futuro si mi pasado es mi presente. Cómo disuelvo esos recuerdos en la mente. Cómo hago para avanzar sin traerlo a la memoria por culpa de cada rostro que veo en la calle. Quien sabe dónde lo hallaré. A veces me digo que no lo necesito y es verdad, por que para vivir, puedo sola, pero para verme féliz aun creo necesitarlo.


Aun mi esperanza es mas fuerte que mi control; cree ella tener siempre la razón, es esa la respuesta a tanto optimisto masoquista. Sin embargo mi control avanza, lento pero firme. Llegará el día en que sencillamente la esperanza se rinda y ya no vuelva a recordarlo.